La demanda argumenta que Musk no ha sido confirmado por el Senado ni ocupa un cargo oficial dentro del gobierno, lo que haría ilegal su capacidad para emitir órdenes, despedir empleados y modificar contratos gubernamentales. La acción legal busca detenerlo antes de que cause más daños, según los demandantes. “Elon Musk, con la aprobación del presidente Trump, ha estado desmantelando agencias federales, accediendo a datos sensibles y generando caos en todo el país”, señalan los documentos judiciales.