Aun a menor escala, el gallego sigue siendo un pueblo emigrante, si bien sale hoy a lugares más próximos que los que frecuentó a lo largo del siglo XX. El Instituto Nacional de Estadística (INE) acaba de poner en cifras el movimiento demográfico que supone el abandono de la comunidad gallega por otros puntos de España. El resultado es que durante el 2007 algo más de 17.500 vecinos empadronados en A Coruña, Lugo, Ourense o Pontevedra optaron por salir y asentarse en otros lugares de España. Ese guarismo representa un incremento de casi un 3,2% c
|
etiquetas: galicia , emigración