#14 Undécima. Consumo de sustancias que perturben o disminuyan las facultades psicofísicas del personal de conducción o circulación.
1. A efectos de lo dispuesto en el artículo 92.3 de la Ley 39/2003, de 17 de noviembre, se establecen como tasas de alcoholemia máximas permitidas para la conducción de máquinas de transporte ferroviario las siguientes:
Tasa de alcohol en sangre: 0,10 gramos por litro.
Tasa de alcohol en aire espirado: 0,05 miligramos por litro.
2. Las tasas referidas en el apartado anterior serán, asimismo, de aplicación al personal de circulación ferroviaria que preste servicios en puestos de mando, control de tráfico centralizado, subestaciones, estaciones, terminales y cualesquiera otras dependencias y locales en los que se desarrollen trabajos relacionados con aquella.
3. En los programas formativos destinados a la obtención y el mantenimiento de los títulos habilitantes del personal de conducción o circulación, se incluirán contenidos acerca del conocimiento de estos aspectos: alcohol, drogas y sustancias psicoactivas y medicamentos. A su vez, las entidades ferroviarias fomentarán entre el citado personal, el uso responsable de medicamentos que pudieran alterar, perturbar o modificar sus facultades psicofísicas en el desempeño de sus funciones.
Lo que te digo es que el maquinista no tiene que firmar nada.
No es un convenio de empresa. Es una ley firmada por el rey y publicada el el BOE con la misma validez que otorga a la policía hacer controles de tráfico.
No es una cuestión de empresa.
Y con esto ya cierro.
#1 Se los hace gente de la empresa.
Seguridad en la circulación son gente que se dedica a eso y a investigar accidentes ferroviarios.
Acompañados de personal sanitario.Eso si.
#4 Yo creo que despues del tiempo pasado Macri bien podria haberse informado. En caso contrario si no se ha enterado veo mas culpa en quien siendo presidente de una republica no controla a su ejercito que a quien le ha mentido. En caso de que eso sea cierto.
"La patria de cada cual no tiene por qué necesariamente coincidir con los límites impuestos por estados o quedar delimitada por las fronteras que otros hombres deciden. Se trata, creo, de sentimiento, genética y memoria, no de decisiones políticas.
Las fronteras no dejan de ser rayas que los hombres pintan sobre los mapas. Y estas fronteras pueden cambiar con muchísima facilidad y rapidez. Y a menudo sin mucho sentido. Me viene a la memoria la curiosa historia de un antiguo compañero de tripulación polaco con el que navegué hace años. Él y todos sus antepasados hasta donde su memoria alcanzaba habían nacido en el mismo pueblo. Él nació en Polonia; pero sus antepasados, aún habiendo nacido en el mismo lugar, habían nacido también en Ucrania y en Prusia. Así, cuatro generaciones de de una misma familia nacidas en el mismo lugar habían tenido nacionalidades diferentes.
Cualquiera que lea Historia puede ver que las fronteras de países y naciones han cambiado, cambian y cambiarán constantemente. Es algo casi tan natural como las estaciones".