“Los egipcios tendrían suerte si sus nuevos gobernantes adoptan el modelo implementado por Augusto Pinochet, quien tomó el poder en medio del caos y contrató a reformadores de libre mercado quienes parieron una transición a la democracia”, sostiene. Y advierte que el jefe de las fuerzas armadas egipcias, Abdel Fatah Al Sisi, sufrirá la suerte del presidente despuesto,Mohammed Mursi, si intenta restaurar el “viejo orden de Hosni Mubarak”.