Desde el departamento de vehículos-viejunos-que-nunca-llegaron-a-nada nos llega este curioso trasto anfibio de Chrysler de la década de 1960. Con un motor de 225 CV según se movía gracias a unos gigantescos tornillos cilíndricos huecos, que le permitían desplazarse por tierra o por agua.
|
etiquetas: vehículo , anfibio , tornillo