La lucha se ha extendido por varias provincias, exigiendo la mejora de condiciones y la aplicación de la normativa laboral que Phone House incumple como parte de su política de empresa. Ahora la Sección Sindical de Madrid tiene que priorizar en sus reivindicaciones, pues como era de esperar la empresa ha comenzado a aplicar la represión, el acoso y la persecución de las compañeras afiliadas a CNT, con el único objetivo de desaherse de ellas cuanto antes. Como siempre, y puesto que a la CNT no pueden sobornarla con elecciones sindicales...