“Se obvia el deber de socorro”. “Queda muy claro que, debido a los protocolos de la Comunidad de Madrid, a mi juicio ilícitos por ser discriminatorios (…) No hay más que ver su contenido”, emplaza, asegurando que los denominados como protocolos de la vergüenza son “contrarios al deber objetivo de cuidado” y con ellos se “infringe la autonomía del paciente” al no respetarse su derecho a ser trasladado a un hospital: “Se trataba de una sintomatología que requería asistencia médica por ser claramente de gravedad, tal y como indica la historia...