El nombre de Manuel José García Caparrós está grabado con letras imborrables en la memoria colectiva de Andalucía. Este joven malagueño, trabajador de la fábrica de Cervezas Victoria y militante del sindicato Comisiones Obreras (CCOO), fue asesinado el 4 de diciembre de 1977 durante una manifestación histórica en favor de la autonomía andaluza. Su muerte, con tan solo 18 años, lo convirtió en un símbolo de la lucha por los derechos y la identidad del pueblo andaluz, así como en una víctima de la represión estatal de la Transición española.
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etiquetas: manuel josé garcía caparros , andalucia , transición española 
Granada, Málaga y Almería
Como eso de llamar idioma andaluh al habla de Sevilla (y principalmente de su capital)
Como dijo Reverte en 1996, Sevilla es una ciudad estado renacentista que se pasa el día celebrándose a si misma
Estudio de empleo tecnológico por provincias en España. Málaga NO está a la cabeza en Andalucía en empleo tecnológico. Ese mantra se repite mucho pero es fácil rebatirlo cuando buscas los datos reales.
Todas esas empresas que indicas también tienen sede en Sevilla, salvo Google, que tiene sede en Málaga porque compró a la malagueña VirusTotal.
Soy andaluz, tengo 55 años y es la primera vez que oigo hablar de este hombre.
Después me di cuenta de cuánto no sabía sobre la historia de mi tierra y de cuánto se había ocultado a los andaluces y cómo se nos había convencido de lo muy españoles y lo poco 'apreciable' que era reclamar cultura propia pot parte de wuienes ni diquiera éramos capaces de hablsr correctamente el idioma.
Y desde… » ver todo el comentario
Otro ejemplo claro es "la desbandá"...
Nos han robado la historia.
esta: (es lo bueno de internet, si te acuierdas de un trozo de cancion, la encuentras por muy rara que sea):
Un cuatro de diciembre muere un malagueño
una bala traidora le quitó la vía
tan solo porque estaba queriendo a su pueblo
y alzando la bandera de su Andalucía.
Seguro que la mano que apretó el… » ver todo el comentario
Obviamente reconozco la idiosincrasia andaluza, igual que reconozco la idiosincrasia extremeña, murciana, castellana, etc. Pero sinceramente no creo que seamos tan distintos como para segregarnos en comunidades. Por otra parte, si tengo que elegir entre centralismo y autonomías personalmente me decanto más por el centralismo. No por cuestiones ideológicas, sino prácticas. Creo que es mucho más económico y menos discriminatorio un sistema central, con igualdad de condiciones para todos, que 17 gobiernos distintos.