"La decisión (el boicot a la nueva Comisión Europea) no ha resultado del agrado de sus socios del Partido Popular Europeo, razón por la cual quizás le convendría evaluar la capacidad de los actuales interlocutores del PP con sus homólogos europeos con el objetivo de evitar nuevas torpezas que acaben provocando que la soledad que el partido experimenta a nivel estatal no se acabe trasladando también a las instituciones de la Unión Europea."