La paz y las sanciones

Una de las mejores maneras de conocer la situación en que uno se encuentra es tratar de buscar las salidas que nos quedan, según vaya evolucionando el escenario. A esto se le llama desarrollo táctico en ajedrez. O simplemente mentalidad de ratón. Pero el caso es que funciona.

En este caso, estamos en una guerra. Hay que joderse. 

Rusia, Una de las mayores potencias nucleares del mundo, que es, a la vez, el país más extenso de la Tierra y gran proveedor de materias primas, ha atacado militarmente a su vecino, Ucrania. Las razones que el agresor aduce, por esta vez, nos dan igual, porque ya hemos hablado mucho de ellos y podemos seguir haciéndolo en otros artículos.

El caso es que se combate sobre el territorio de Ucrania y que la OTAN y sus aliados Occidentales han impuesto unas fortísimas sanciones económicas a Rusia para hacerle sentir dolor y arrepentimiento por lo que ha hecho y, de paso, si es posible, convencer a este país para que se eche atrás.

Las sanciones, como siempre sucede, hacen mucho daño a Rusia, peor también a muchos de los países que las imponen, aunque no el mismo daño a todos, ni en la misma medida. A Algunos países les costará cubrir la demanda energética, otros tendrán pérdidas financieras, en otros se verá una terrible escasez de materias primas, fertilizantes o incluso comida. Todo el mundo sufrirá, peor lo que se espera es que sea Rusia la que más sufra, para que así se va obligada a acudir a la mesa de negociación.

Hasta aquí, la posición en el tablero. Así, marranamente. Con perdón.

Y ahora, la pregunta del ajedrecista o del ratón: si mañana por la mañana, antes de tomar el café, Putin decidiera retirarse de Ucrania y firmar la paz, ¿cuánto tiempo más durarían las sanciones?

¿Alguno pensáis que nada más firmarse la paz acabarían las sanciones?

¿Alguno cree que esas sanciones no han llegado para quedarse, perjudicando a Europa por tiempo indefinido, pase lo que pase en Ucrania?

¿Alguien cree, en suma, que hay alguna relación entre lo que pase en Ucrania y esa batería de sanciones?

Yo, francamente, no lo creo.

Por mi parte, imagino un escenario en el que, tras la retirada, se pediría que los culpables de la invasión fuesen juzgados por un tribunal internacional, que Rusia aceptase el estatuto de derrotado pagando reparaciones de guerra, que Putin se entregase, que se celebrasen elecciones al estilo Occidental en Rusia, o yo qué sé que exigencias novedosas y crecientes para retirar las sanciones. 

Yo me imagino un escenario en el que seguiríamos comprando el gas del fracking a los americanos, con la banca rusa desconectada y las materias primas en manos de no sé quién, pero no en las nuestras.

No, no creo que la paz vaya a traer el fin de las sanciones.

No, no me puedo creer que las sanciones terminen cuando termine la guerra y se intente recuperar la normalidad con Rusia, o algo parecido a una normalidad.

Las sanciones y la paz son cosas independientes, nos digan lo que nos digan, y eso indica que estamos mucho más profundamente jodidos de lo que pensamos, porque los incentivos de ambas partes son otros, muy lejanos a la paz.

Visto así, ¿qué creéis que opinarán los rusos si ganan? ¿Y qué creéis que opinarán si pierden? La posición es mala, joder: muy mala. Mucho peor de lo que pensamos.